Hoy 21 de octubre, vuelve a la mente de todos los intelectuales venezolanos la ausencia infinita de una de nuestras voces más lúcidas, hoy conmemoramos dieciséis años de la desaparición de nuestro José Ignacio Cabrujas. Víctima de un infarto, Cabrujas dejó de existir en
José Ignacio, como todos los genios, se fue muy pronto, nos legó un cúmulo de extraordinarias reflexiones sobre nuestra idiosincrasia, sobre cómo somos, de dónde venimos e irónicamente vislumbraba hacia dónde iríamos. A través de sus piezas teatrales, ensayos, artículos y telenovelas, ha sido el autor que mejor ha radiografiado el Ser venezolano. Su obra dramática es hoy por hoy una de las más importantes de
Su vida siempre giró en torno a la cultura, desde ese primigenio encuentro con Los miserables, de Víctor Hugo en la platabanda de su casa en Catia en su alocada adolescencia o desde la oscuridad de
Los Testimonios, de la gente que lo rodeó, que trabajó con él o que simplemente gozaban de la cercanía de la amistad, siempre tienen una palabra positiva de su genio, de su verbo, de su humor negro que nos hacía beber como una Sopa de piedras y de su gusto culinario, amén de su gran amor: la ópera, género que estudió, dirigió y cultivó como erudito.
También nos deleitó como si estuviéramos en Una noche oriental con sus interpretaciones actorales, los que lo disfrutaron como actor-comentan- que su transformación en el escenario era increíble, lo que le valió el reconocimiento inmediato del público. Multifacético, integral, magnífico como un Artista de barba y pumpá desde el escenario, la pantalla chica o la grande y desde las letras de los diarios más importantes del país, José Ignacio Cabrujas defendió su pensamiento a capa y espada como un púgil sobre el cuadrilátero, como Sonny León, luchó por una mejor Venezuela, esa que deseaba y anhelaba en cada personaje que escribía. Hoy que nos parece mentira su partida hace ya dieciséis años, seguimos creyendo que José Ignacio Cabrujas es Un Americano Ilustrado.
L. A. R.
Caracas, 21/10/2011
Comentarios: luisalbertorosas@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario